Antes de que Cristiano Ronaldo llegara al Real Madrid, una de las figuras que tenía el club era Robinho. El ex delantero brasileño llegó siendo figura, estrella del Santos de Brasil y siendo comparado con Pelé. La expectativa fue muy alta y terminó saliendo de la peor forma porque Robinho nunca funcionó y de hecho se esperaba mucho más. Como si fuera poco, Robinho luego fue vendido al Manchester City por 35 millones de euros y Real Madrid trajo a Cristiano Ronaldo, que rompió todos los récords.

Hace un tiempo, Robinho recordó esa época en una entrevista con el medio español Marca y reveló: "No lo voy a perdonar, en el Madrid no podía ser el mejor del mundo. Tenía calidad de sobra para ser titular y a veces ni jugaba. Respeto mucho a Cristiano, pero es inaceptable que quisieran negociar conmigo. Luego, cuando sus intentos de fichaje se vinieron abajo, quisieron cambiar de opción y me dijeron que yo era muy importante. Pero mi cabeza ya no estaba en el Madrid. Los brasileños no lo tenemos fácil cuando llegamos a Europa. Los jugadores de allí se pueden sentir un poco celosos porque los brasileños tenemos fama de buenos futbolistas".

Robinho llegó a Real Madrid por un pago de 30 millones de dólares al Santos. Robinho jugó tres años en Real Madrid: 137 partidos y 35 goles. Cuando el Real Madrid entendió que era momento de cambiar de aire, el Manchester City pagó 42 millones de euros por su traspaso, siendo una de las primeras figuras del proyecto árabe en el club.

Hoy Robinho vive un momento extremo y devastador ya que en un fallo judicial, Robinho fue condenado a nueve años de prisión. La Justicia de Italia dictaminó que el futbolista brasileño fue parte de una violación grupal cometida contra una mujer albanesa en 2013 cuando él estaba jugando en el AC Milan.

El otro acusado es el compañero de Robinho, Roberto Falco, que también recibió la misma condena. La justicia italiana está en condiciones de pedir la extradición de Robinho y Falco, pero la constitución de Brasil no permite el veto de brasileños, por lo que el ex futbolista cumplirá su condena en su país.

"Estimaron que el recurso presentado por el jugador era inadmisible y que por lo tanto la condena es definitiva", indicó a la prensa el abogado de la víctima, Jacopo Gnocchi. El sueño de Robinho era tratar de tener un fallo a favor para poder volver a jugar al fútbol, sin embargo, eso no será posible y su retiro del fútbol es automático tras la decisión de la Justicia Italiana.