Paul Pogba vive un momento crucial para su carrera. El mediocampista francés que está en la Juventus y tuvo una temporada desastrosa por sus problemas físicos, ahora vive una crisis absoluta por dar positivos dos veces en un control de dopaje. Hace un mes, Pogba dio positivo de testosterona en un control antidopaje. La prueba fue en el partido que Juventus ganó 3-0 contra Udinese, en el primer partido de la actual temporada. Esa tarde, el jugador francés no disputó ningún minuto de aquel encuentro, pero le hicieron el control igual y dio positivo. 

Ese mismo día, Pogba quedó suspendido por tres meses por el uso e incluso el intento de consumo de sustancias prohibidas. Además, la Fiscalía Antodopaje de Italia le pidió una contraprueba a Paul Pogba para confirmar y avanzar en el caso. En los últimos días, Pogba hizo esa contraprueba y también dio positiva, por lo que la situación terminó de explotar.

Por el momento, el castigo que recibiría Pogba sería de dos años sin poder jugar al fútbol, pero si la Fiscalía confirma que el uso de testosterona fue intencional, la sanción crecería hasta cuatro años, es decir, sin jugar hasta 2027/28. Ahora Paul Pogba tendría una semana para presentar una defensa, que debe ser contundente desde todos los aspectos para evitar el castigo mayor.

El castigo no es solo deportivo ya que por reglamento, Pogba perdió su salario de futbolista profesional. Actualmente, Pogba cobraba 8 millones de euros más dos millones en bonus, lo que lo ubicaba como el mejor pago de Italia. Tras el positivo, Pogba pasó a ganar 24 mil euros anuales, es decir, dos mil euros por mes ya que es el mínimo marcado por la normativa.

Ante la crecida del caso, en Juventus evalúan la rescisión de contrato de Pogba ya que el francés está totalmente marginado y no puede tener contacto con nadie del club. El francés se mantiene en silencio ante este escándalo y lógicamente el problema también golpea al seleccionado francés, que lo tenía en carpeta para la Euro2024 y el Mundial 2026.