Hace un mes, Luka Modric recibió una oferta de Arabia Saudita para irse con Karim Benzema. Esa oferta era de un año, con otro opcional y un salario de 50 millones de euros, sin embargo, Modric la rechazó. El croata tiene una vida armada en Madrid, su familia está muy acomodada a la vida de España, él juega en el Real Madrid y sabe que nadie lo tocará. Para Modric, ese combo es inigualable porque es soñado.

Sin embargo, Luka Modric decidió rechazar todo y se quedó en el Real Madrid, renovando por un año. "Si el club piensa que merezco seguir, quiero que sea por merecimiento, no por otra cosa. Me siento bien y quiero seguir en el Real Madrid. Vamos a ver, tengo que hablar con el club, ver lo que piensa. Independientemente de lo que pase, nada puede cambiar mi relación y mi pensamiento con el Real Madrid. Es el club de mi vida y pase lo que pase nada puede cambiar ni romper nuestra relación. Vamos a ver lo que pasa”, había dicho Modric hace unos meses cuando negociaba su renovación.

Modric se quedó porque su influencia en Real Madrid es absoluta, pero el croata se encontró que en esta temporada prácticamente no está jugando. Ancelotti está optando por jugar con Tchouaméni, Valverde, Bellingham y casi siempre ingresa como suplente en los últimos minutos. 

En una entrevista con el medio croata, Sportske Jutarnki, Modric confesó: “Estoy completamente tranquilo, consciente de que tengo que trabajar como hasta ahora y que tarde o temprano tendré oportunidades. Soy consciente de que tenemos mucha competencia en el mediocampo, que estos jóvenes son jugadores de primer nivel. Sigo firmemente convencido de que todavía puedo jugar como el Real Madrid lo necesita”.

“Mi única condición para quedarme era que me trataran como un jugador competitivo, como lo he sido hasta ahora, y no que me mantuvieran en la plantilla basándose en méritos pasados. Nadie está contento cuando está fuera del juego. No me quedé por quedarme, sino que quiero jugar y disfrutar del fútbol y del Madrid. Después de todo en mi carrera, en la que no estoy seguro de haber estado en la banca durante tres partidos seguidos, esa sensación me resultaba especialmente extraña”, lanzó Modric, sin temblar el pulso.

“Nos sentamos y rápidamente llegamos a un acuerdo. Llevo 12 años en el Madrid y nunca hemos tenido problemas. Nuestra relación es extraordinaria. Hubo ofertas. Sólo si el Real no me quisiera, entonces consideraría otras opciones. Estoy feliz y realizado en el Madrid y mientras sea así no pienso en otras opciones”, sentenció Modric, aunque la información sería otra. Modric no quiere un final siendo suplente y buscaría una salida o reflotar la situación con los clubes árabes. En Real Madrid, las palabras sorprendieron y buscan sacarle dramatismo.