La información era precisa, contundente y estaba todo cerrado. Por la noche del último sábado, Sergio Ramos llegó a un acuerdo total con Al Ittihad de Arabia Saudita, equipo en el que está Karim Benzema. El trato era por un contrato de dos años, con un salario que superaba los 50 millones de euros por año y desde el club árabe ya preparaban todo para el evento de la presentación y la revisión médica. De hecho en Al Ittihad ya tenían listas las camisetas para sacarlas a la venta.

Sin embargo, de forma abrupta e inesperada, Sergio Ramos frenó todo y le dio un giro impactante a su carrera. En las últimas horas, Sevilla le ofreció un contrato de un año, con posibilidad de extenderlo a otro más y sumarse al club. El objetivo interior de Ramos era esperar una oferta de Inter Miami por Messi o del Sevilla, el club que lo formó.

Finalmente, la oferta de Sevilla llegó a manos de Ramos y a falta de detalles, se firmará todo y se anunciará su llegada al club andaluz. El fichaje sorprende porque tras irse al Real Madrid, la relación de los hinchas con Ramos no es la mejor y han tenido más de un encontronazo, pero la realidad ahora es que Ramos jugará en Sevilla.

El enojo en Al Ittihad es importante con Ramos, porque lo esperaban entre lunes y martes para la revisión médica. Ramos también tenía ofertas del Galatasaray, Besiktas y clubes europeos de menor medida pero no eran tenidas en cuenta por él. El defensor de 37 años seguirá en Europa y además jugará la Champions League ya que Sevilla está en el Grupo B con Arsenal, PSV y RC Lens de Francia. El fichaje de Ramos contaría con el aval de Mendilibar, entrenador del primer equipo de Sevilla.

Ramos se formó en el Sevilla, y jugó tres temporadas en el primer equipo, acumulando 50 partidos y tres goles. Luego de ello, Real Madrid lo fichó por 22 millones de euros y su carrera terminó siendo de leyenda en el club blanco. Ahora Ramos tendrá que definir detalles de su contrato y en las próximas horas se oficializaría su arribo al Sevilla, algo totalmente impensado aunque puede revivir a un Sevilla, que tuvo una temporada traumática en el 2022/23.