Valentín Barco está desde hace años en las inferiores de Boca Juniors y todos sus hinchas supieron siempre que era un jugador distinto a todo. Su velocidad, su técnica, su concepto de juego, su claridad y sus pases hacían del Colo Barco, un futbolista tremendo. Eso lo sabían todos, pero ni Sebastían Battaglia ni Hugo Ibarra (últimos entrenadores de Boca), le prestaron atención a ello y decidieron ignorar el fútbol del defensor y mediocampista de 19 años.

Con la llegada de Jorge Almirón, Valentín Barco empezó a entrenar con el primer equipo y el entrenador le dio los minutos que merecía desde el principio. En cuestión de cuatro meses, Barco se convirtió en un futbolista irremplazable para Boca Juniors porque su fútbol es impresionante y es el mejor jugador del primer equipo. Su última función fue contra Nacional de Uruguay, por octavos de final de la Libertadores, donde fue figura absoluta y marcando el último penal.

No obstante, en las últimas horas, Boca Juniors recibió dos ofertas de Brighton por Barco: 8 millones por el 80 por ciento del pase y 9 millones por el 90 por ciento. Por diferencias contractuales, Boca Juniors solo le pudo poner a Barco una cláusula de 15 millones de dólares, cifra más que accesible para los clubes de Europa.

La postura del Brighton sería ejecutar esa cláusula de 15 millones y llevarse a Barco ahora mismo, pero la idea del jugador sería distinta. Barco quiere aceptar la oferta pero irse de Boca a fin de año, momento en el que terminarán todas las competencias. Barco está a punto de jugar un cuartos de final de Libertadores decisivo contra Racing y no quiere perdérselo. 

Desde el entorno del futbolista, y su equipo de representantes, luchan para convencer al futbolista de irse ahora mismo, tal como quiere el Brighton. Al pagar la cláusula de salida, quien termina decidiendo es el futbolista. Boca no se meterá ni influenciará a Barco para convencerlo porque sabe que puede ser contraproducente. El club sabe que si logra retenerlo en este mercado de pases, le harán un contrato nuevo con un aumento salarial y posiblemente de la cláusula. 

La situación es compleja, Barco está al borde de irse del club y en medio de la Conmebol Libertadores. Además del Brighton, Manchester City también se metería en la pelea y buscaría pagar su cláusula de salida.