La imagen quedó para la posteridad por el contexto y por la reacción. La Selección Argentina acababa de ganar la Copa del Mundo y Dibu Martínez había sido electo como mejor arquero del mundo. El arquero argentino, desatado por la locura, no tuvo piedad y decidió ponerse el premio en los testículos, delante de todos los directivos. Esa reacción quedó para la historia, pero en lo que respecta a ex futbolistas y directivos, no gustó a nadie. Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, fue muy duro con Dibu Martínez y revivió la polémica.

"Fue una cosa repugnante, eso no se hace. Ganaste la Copa del Mundo. Demuestra algo de grandeza y que no eres un ser primitivo. Puedes ser un buen arquero, pero si no eres buena persona. Messi debería haber dicho algo, decirle que dejara de hacer eso, que mostrara algo de respeto. Al final, juega todo el año con Mbappé", lanzó Ceferin en una entrevista.

El máximo directivo de la UEFA continuó analizando esa reacción: “Si ves cómo reaccionó durante los penales. No puedo entender que se burle de Mbappé, lo de la marioneta y cosas así. Eso no es deportividad, fue primitivo y no me gustó. Messi debería haber dicho algo, decirle que dejara de hacer eso, que mostrara algo de respeto, eso no es deportividad”.

En su momento, Dibu Martínez explicó por qué hizo ese festejo tras recibir el premio a mejor arquero del mundo: “Lo hice porque los franceses me abucheaban. La soberbia conmigo no va, vengo de un lugar muy humilde".

Estas palabras de Ceferin se suma a Patrick Vieira, entre otros: “A veces no se pueden controlar las decisiones emocionales. Pero fue una decisión estúpida por parte de Martínez hacer esto. Algunas de las fotos que vi del portero argentino restan brillo a lo que Argentina logró en el Mundial. No creo que necesitaran este tipo de reacciones”. 

El presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos de París 2024, Karl Olive, fue el más duro de todos porque pidió sanciones a la FIFA: "Me gustaría que la FIFA le quitara el trofeo de mejor arquero a Emiliano Martínez. Lo que hizo no es deporte y tampoco un buen ejemplo para mostrar. Es una imagen denigrante".