Una de las principales condiciones que impuso en su momento, Kylian Mbappé para seguir en el Paris Saint Germain era contratar a Zinedine Zidane como reemplazante de Mauricio Pochettino. El francés era el deseado por toda la directiva del PSG pero principalmente de Kylian Mbappé, quien lo habría puesto como el elegido para tomar el mando del primer equipo. Sin embargo, Zidane prefirió esperar a que Deschamps salga de Francia y tomar el cargo de la Selección, pero eso no sucedió y todavía sigue sin trabajo.
Lo que sucede es que Zinedine Zidane no quiere saber nada con asumir el rol de entrenador del Paris Saint Germain y Nasser Al Khelaifi busca convencerlo a fuerza de dinero. Su pasado en el Olympique de Marsella lo hace dudar seriamente de si tomar el mando o no. La situación de Galtier mejoró apenas, con el triunfo ante el Marsella en Ligue1, pero la realidad es que todo se reduce al partido con el Bayern Munich por Champions League.
Hoy en día, el técnico mejor pago es Diego Simeone, que embolsa 24 millones de euros por año, mientras que la oferta del PSG a Zidane rondaría los 26 millones de euros por temporada. La negativa de Zidane pasa por distintos motivos, tanto deportivos como sentimentales.
Como marcamos, el ex entrenador del Real Madrid tiene un fuerte vínculo con el Olympique de Marsella, rival del PSG, y además, sueña con dirigir Francia luego de Qatar 2022. No obstante, también hay un sentimiento con el Real Madrid y no le convence el proyecto parisino.
Zidane también ve que la presión que hay sobre el PSG es desmedida y él no pretende atravesar por esa situación. Tanto Tuchel como Pochettino han vivido la misma situación de desgaste ante el mal funcionamiento del equipo y él teme vivir lo mismo. PSG sabe que Zidane no será fácil y que un plan secundario puede ser un entrenador con personalidad y que pueda domar un vestuario lleno de egos.
Hace unos meses, Zidane se vio en un escándalo por las declaraciones de Noel Le Graet, presidente de la Federación Francesa de Fútbol, asegurando que no le iba a dar el gusto de tomar la Selección de Francia: "Zidane siempre estuvo por debajo del radar, no hay que contar cuentos. Tenía muchos seguidores, algunos esperaban la salida de Deschamps. Pero, ¿quién puede criticar seriamente a Deschamps? Nadie puede. Siempre se puede fallar un partido, pero llevo 10 años con él, no ha habido muchos problemas. Su salida siempre genera clicks”.