En una operación de hermetismo absoluto, Boca Juniors logró cerrar un refuerzo tremendo al quedarse con el defensor paraguayo de 30 años, Bruno Valdez. El zaguero no renovó su contrato con el América de México y Boca Juniors aprovechó esa oportunidad al máximo. Juan Román Riquelme, vicepresidente de Boca Juniors se comunicó personalmente con él y lo convenció de jugar en su club cuando ya tenía todo arreglado con el Cruzeiro de Ronaldo Nazario.
Valdez estuvo tres años en Cerro Porteño y en 2016, América de México pago 3.5 millones de dólares por su pase. Desde entonces, acumuló 230 partidos en el América de México y 27 goles, siendo el defensor más goleador de la historia de Las Águilas. Valdez tenía todo apalabrado con Cruzeiro y en los próximos iba a viajar a Belo Horizonte para firmar su contrato, pero el llamado de Riquelme cambió todo y viajará a Buenos Aires para la revisión médica y la presentación como nuevo futbolista Xeneize.
El contrato que firmará Valdez será hasta junio del 2025 y llega para ayudar a una defensa que se ve desprotegida luego de la lesión de Nicolás Figal, de Marcos Rojo y la salida de Carlos Zambrano. En la última pretemporada del América de México, Valdez fue uno de los máximos protagonistas ya que en el amistoso contra el Manchester City se peleó con Jack Grealish, el fichaje más caro de la historia del club.
Valdez se destaca por su juego aéreo, por su velocidad para los cruces y la flexibilidad para jugar tanto de primer central como segundo central. Se espera que Valdez se sume a la pretemporada de Boca Juniors en los próximos días. Lo que habría pesado en la decisión de Valdez es que Boca juega competencia internacional, mientras que Cruzeiro solamente tendrá torneos domésticos ya que viene de ascender de Serie B de Brasil. En el club brasileño, el enojo es grande porque estaba todo acordado.