En la semana, uno de los jugadores experimentados de Bélgica, Kevin De Bruyne, dio explosivas declaraciones de sus compañeros y cuestionó la falta de actitud al manifestar que todos los integrantes del plantel son demasiados viejos. En ese punto, el jugador sostuvo que si bien se sumaron jugadores nuevos al equipo, no se acoplaron al plantel que viene de 2018. Tras esas declaraciones, su compañero, Jan Verthonghen, criticó a De Bruyne y apuntó: "Supongo que atacamos mal porque también somos demasiado viejos delante. Hay muchas cosas que se me pasan por la cabeza y que es mejor no decir, o al menos no fuera de los vestuarios. Es muy frustrante lo de hoy".
El entrenador de Bélgica, Roberto Martínez, se hizo eco de esta interna que se forjó dentro del plantel belga y desmintió: “Para nosotros no cambió nada. No estábamos felices con nuestro rendimiento, aunque ganamos el primer partido. En el segundo perdimos y no estábamos satisfechos. Tuvimos que reaccionar como lo haces en el mundo de élite, con responsabilidad para mejorarlo. Hemos visto la tormenta que hubo fuera, quizá estábamos escuchando demasiado ese ruido externo antes del torneo. Además, en Bélgica están aprovechando esta situación para publicar noticias falsas”.
Con mucho descontento por la situación, el coach español agregó: “Parece que hay un deseo de encontrar cosas negativas en lugar de disfrutar de la mejor generación que Bélgica ha tenido. Esto puede haber sido una lección, estamos aquí para luchar por lo que queremos”. Además, completó: "Quien se haya inventado la historia se metió un gol en contra. Los futbolistas contra Marruecos tuvieron una buena actuación, aunque no estamos en el punto ideal. Hemos venido aquí para competir contra las mejores selecciones del mundo y tenemos que estar listos para competir".
A la hora de hablar del Mundial, Martínez fue contundente y sostuvo: "Siendo muy sincero, no es un momento para que un entrenador piense en sí mismo. Yo le doy un carácter natural. Hemos perdido un partido del Mundial y las consecuencias tienen que ser negativas, pero llevo 17 años en esta profesión y sé exactamente lo que pasa en un vestuario. Hay momentos que nos hacen más fuertes". Y añadió: "Nos hemos dado una segunda oportunidad porque no es normal que sin jugar a tu nivel en los dos primeros partidos del mundial, estemos aún con vida. No siempre hemos estado en Mundiales y yo lo afronto con unas ganas muy grandes y vemos el partido frente a Croacia como una oportunidad de disfrutar".