Paris Saint Germain y Benfica jugaron un primer tiempo de mucha fricción, con roces importantes y patadas que pudieron haber terminado mal. En más de una ocasión, futbolistas de ambos equipos se cruzaron, por reclamos de patadas importantes, como en este caso de Nicolás Otamendi, defensor de Benfica, que tuvo la tarea de frenar a Kylian Mbappé.
En el primer tiempo, Mbappé escapó solo por izquierda y quedó cara a cara con Otamendi, siendo el argentino, el único obstáculo para llegar al arco. En velocidad, Mbappé amagó ir por fuera y se mandó por dentro, descolocando a Otamendi, que sin dudarlo un segundo, le fue directo a la rodilla de Mbappé.
El francés cayó, quedó dolorido y Otamendi se llevó la amarilla. La hinchada del PSG protestó pidiendo expulsión para el argentino, pero todo quedó en la amonestación. Minutos después, Mbappé tuvo un penal y abrió el marcador para su equipo. El francés tuvo horas convulsionadas ya que está disconforme con el proyecto deportivo y quiere marcharse del club en el próximo mercado de pases.