El primer tiempo del FC Barcelona en el Sánchez Pizjuan contra el Sevilla fue de lo mejor del año. El equipo de Xavi mostró autoridad, buen fútbol y además, disfrutó de un Robert Lewandowski espectacular, que físicamente está pleno y también marcó un golazo de volea para establecer el 2-0 ante el Sevilla. No obstante, en el final del primer tiempo, Lewandowski tuvo su primer enojo dentro del campo como jugador del FC Barcelona.
Tras una mala jugada de ataque del Sevilla, Dembélé tomó el balón en mitad de cancha, y con un solo rival por delante encaró al arco de Bono sin importar lo que sucedía alrededor. Mientras Dembélé corría, Lewandowski hizo un sprint impresionante desde su área al arco del Sevilla, absolutamente solo esperando el pase de Dembélé.
El francés nunca se la dio, enganchó y ante la salida de Bono, definió con una sutil vaselina que se fue afuera. Dembélé se quedó lamentando, pero la imagen fue Lewandowski, reclamándole por qué no le pasó el balón cuando estaba solo y llegando a la carrera al área del Sevilla. El polaco quedó parado, mirándolo y haciéndole algún que otro gesto.
La discusión no pasó a mayores y el francés luego le pidió disculpas a Lewandowski. El FC Barcelona goleó 3-0 y quedó a dos puntos del Real Madrid en LaLiga, mostrando que va a competir directamente por el título de España. Lewandowski acumula cinco goles en tres partidos oficiales, cuatro de ellos fueron en LaLiga.