En una entrevista con TNT Sports Chile, Arturo Vidal fue directo: "Puede ser posible que mi carrera en Europa esté terminada. Y yo tengo un sueño que es jugar en el Flamengo. Me gusta mucho Flamengo, les tengo mucho cariño. La camiseta que tengo me la regaló el presidente. Eso me llenó el corazón. Tengo el sueño de jugar allá, no lo puedo negar. Cuando se dé, iré para allá. Ojalá sea pronto, si el entrenador o los dirigentes me quieren, habrá un acercamiento y yo haré todo lo posible para llegar".

Increíblemente, Vidal siguió hablando de su futuro como si estuviera todo firmado con Flamengo: "El capítulo de Europa se puede cerrar. No sé si es el momento, pero si se da, mi objetivo es muy claro: ganar todo con Flamengo, pelear la Libertadores, que es un sueño porque es como la Champions en Europa. Si voy, es para seguir peleando y ser un jugador importante".

Sin embargo, ahora La Gazzetta dello Sport reveló que las palabras indignó a la directiva del club italiano y de Arturo Vidal recibió el peor castigo posible del Inter de Milan. En primera instancia, el chileno fue multado económicamente por decir que se quiere ir del club y por dar una entrevista sin autorización del departamento de prensa.

Pero lo más relevante es que si había alguna mínima chance de que el Inter le renovara el contrato, se difuminó en estas palabras de querer jugar con el Flamengo. Lo que tampoco esperaba el Rey Arturo era que Flamengo no se sienta movilizado por sus palabras: según informa Globo, el club no se plantea su fichaje por temor a desequilibrar las finanzas del equipo.