Puede que Neymar y Lionel Messi hayan jugado el partido más incómodo de su carrera. Tras quedar eliminado de Champions, el Paris Saint Germain volvió a jugar en el Parque de los Príncipes y fueron silbado por 35 mil personas cada vez que tocaban el balón.
Lionel Messi fue de los más silbados y criticados por la hinchada del PSG. El argentino vivió una situación inusual para él y Neymar, que marcó un gol, también vivió algo similar porque la hinchada no quiso gritar el tanto marcado para el 2-0.
Tras ello, Luis Suárez, amigo de ambos y compañero en el FC Barcelona se hartó y salió a defenderlos en Instagram con una foto de los tres y un mensaje contundente: “Como siempre, el fútbol sin memoria. Siempre con ustedes. Los quiero mucho”.
En París ya dan por hecho que Neymar será transferible y que Messi está haciendo lo posible para volver al FC Barcelona. Una crisis monumental, desatada solo en 30 minutos por el Real Madrid.