A pesar de que el VAR salvó dos veces a Brasil de la expulsión de Alisson y anuló dos penales a favor de Ecuador, el seleccionador brasileño vio algo raro y no dudó en ponerlo en discusión en la mesa. Tite fue tajante, directo y ahora instaló un manto de sospecha sobre el arbitraje de Wilmar Roldán.
"Hoy no daba para designar un árbitro del cuarto país de la tabla, cuando jugaban el tercero y el primero. Y Roldán es un buen árbitro, pero da para interpretaciones. Hizo falta un poquito de sensibilidad en la designación", manifestó Tite en rueda de prensa, recordando que Roldán es colombiano.
Fiel a su estilo y siendo frontal, Tite continuó: "Tenemos que tener un poquito de sensibilidad y esta elección careció de ello. Ecuador ha salido favorecido en ocasiones, pero debemos tener sensibilidad con la persona que está dirigiendo".
"Es mucha presión. Podemos interpretar eso. Ejerce una presión innecesaria sobre el árbitro. Él es bueno, pero el ambiente es mucha presión, un millón de estrés y los componentes humanos tienen que ser tenidos en cuenta", concluyó.