Un golazo, 93 minutos completos y una clase de cómo jugar una final controlando el ritmo de un equipo como el Real Madrid. El partido de Luka Modric contra el Athletic Bilbao ha sido inmoejorable y por eso fue electo MVP de la final, recibiendo un abrazo de Florentino Pérez, que recorrerá los medios españoles.
Y además dejó este caño tremendo contra Mikel Vesga. El croata tomó un rebote y en el mismo movimiento, controló el balón y le tiró un caño soberbio al mediocampista rival, que quedó descolocado.
Modric se convirtió en el goleador más veterano en toda la historia de la Supercopa de España con 36 años y 129 días. Además, Modric llegó a los 70 partidos con el Real Madrid luego de cumplir 35 años y superó a Paco Gento, otra leyenda blanca. Ahora va por los 99 de Alfredo Di Stefano.